La comunicación está presente en nuestras interacciones, ya sea que éstas sean presenciales o virtuales.
En uno de nuestros artículos se señalan los extremos que pueden existir alrededor de la comunicación. Hay personas que puedan dar poca o nula importancia a la interacción y, en consecuencia, evitar la comunicación, y otras que procuran la cercanía física y emocional y que llegan a sobre involucrarse a través de la comunicación. Sin embargo ante estas dos polaridades, cabe cuestionar los aspectos que facilitan una comunicación adecuada y la manera en que ésta cobra importancia al hablar de “familias ciberseguras”.
Una comunicación adecuada y que favorece la confianza y la supervisión entre padres e hij@s está caracterizada por los siguientes elementos:
- Promover la escucha ,
- mantener interés por vano o simple que parezca lo que te comunique,
- reconocer la confianza que te tiene tu hij@ por haberte comunicado algo por malo o inadecuado que sea,
- empatía y respeto,
- mantener contacto visual para que tu hij@ capte que es visto y que realmente existe para ti,
- respetar sus sentimientos y pensamientos,
- evitar criticas a pesar de que hubiera motivo, recuerda que si lo criticas es muy probable que después, ya no quiera platicar contigo,
- no interrumpir.
Conforme desarrolles estas habilidades, te darás cuenta que podrás mantener un contacto respetuoso con tu hij@ y podrás estar más enterado de las actividades que elige y, en consecuencia, podrás contar con más elementos para intervenir cuando sea necesario.
Esperamos que estos elementos faciliten la comunicación madre-hij@/ padre -hij@ y también los puedas aplicar en el ámbito cibernético, en donde los chicos y chicas cada día están más expuestos, pero que cuenten con la seguridad de que serán escuchados, comprendidos y apoyados por sus madres y/o padres.
Por Gabriela Oseguera